Imagen extraída de (verdad y luz hoy)
Jn 6, 30-35. ...¿Y qué signos vemos que haces tú, para creer en ti ¿Cuál es tu obra?... Jesús les replicó: "Os aseguro que no fue Moisés quien os dió el pan del Cielo, sino que es mi padre el que os da el verdadero pan del cielo...." Jesús les contestó: "Yo soy el pan de vida. El que viene a mí, no pasará hambre, y el que cree en mí, nunca pasará sed".
"Nadie es buen juez de su propia causa", dice la sabiduría popular. ¿Por qué? Porque todos tendemos a ser muy benevolentes con nosotros mismos y severos con los demás ¿Te ocurre a tí ésto con tu esposa/o?
No olvides que los otros, viéndonos desde fuera, perciben mejor que nosotros las bastas aristas que hacen daño a los demás y a uno mismo. Ya sabes: "No juzgues, para no ser juzgado". En vez de criticar o señalar los fallos de tu esposa/o o hijos, sé amable y corrige con el ejemplo.
Y si no das ejemplo ¡Frena tu lengua y educa tu mente para no juzgar!
Julián Escobar.
La niña resucitada por San Juan de Sahagún
“Un día entra en su casona de Sahagún. Oye llantos en una sala, y, pasa a ver. Allí yace una niña de siete años, entre cuatro cirios amarillos, cubierta la cabeza de rosas, inmóvil y pálida como la cera. Fray Juan coge su mano y dice: “Vamos, perezosilla, que tu madre te aguarda”. Y llevando a la niña, se dirige sonriente hacia los que la lloran. Todos se llenan de espanto y se santiguan. “Vamos, ¿porqué os alarmáis? ¿Porqué si una muchacha se desmaya, pensáis luego que es muerta?" (Tomado de: Verbum Vitae, tomo IV, Pág. 113)
Texto extraído de (Homilética)
Vídeo de "YouTube"
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