Imagen extraída de "Discípulos y misioneros"
Mt 7, 7-12 (+Leer): ..."Tratad a los demás como queréis que os traten; en esto consiste la ley y los profetas".
Educar y educarnos
- ¡No, no Manuel! Ya estoy convencido. No me conviene el matrimonio.
- Yo también estoy convencido de que a usted no le conviene el matrimonio. Primero porque el matrimonio es una vocación y quien no la sienta en su corazón no debería emperrarse en entrar en él. Segundo porque hay que tener un corazón muy generoso y perseverante en mantener vivo el amor, y usted no tiene ni vocación ni es generoso en el amor.
- ¡Ala, me está usted poniendo a p...!
- Es la verdad. Usted es como es. Mire, algo que ayuda a la buena convivencia y al éxito del matrimonio es no querer sobresalir más que tu esposa/o. En el Evangelio se lee: "El que de vosotros quiera ser el primero, que sea servidor de todos"(Mc 10, 44). Ésta propuesta de Jesús para todas las personas, es eficacísima para la convivencia matrimonial.
Jaja, escuche una anécdota.
Cánovas del Castillo Zahirió en cierta ocasión a su amigo Emilio Castelar, al que tanto quería y admiraba: "Emilio, en todo te gusta destacar. Siempre quieres ser el centro. Cuando vas a un entierro quisieras ser el muerto y cuando asistes a una boda, la novia".
El marido o la esposa que desea o intenta destacar por encima del otro/a, está humillando, y una cosa es ser humilde y otra humillador.
Y usted....
- ¿Es precavido para no hacer o decir nada que humille a su esposa/o?
- ¿Hace todo lo posible para ensalzar a su pareja?
Julián Escobar.
Vídeo de "Youtube"
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