Imagen extraída de "Concurso Juguetes"
Mc 10, 13-16 (+Leer): ..."Dejad que los niños se acerquen a mí".
Educar y educarnos
- ¿Qué tal, Manuel?
- Bien y contento. Ayer se quedó en casa un nieto y me hizo sonreír más que mi Isabel cuando me hace cosquillas. ¿Y sabe por qué? Porque en la catequesis le habían dicho que había que hacer sonreír a Dios y él al llegar a casa me dijo: “Abuelo, quiero hacerle reír a Dios, pero como no lo veo, te sientas enfrente de mí, yo cuento chistes y si tú te ríes seguro que a Dios le gustan y se ríe”. ¿Qué le parece la ocurrencia?
- Jaja, divertida, pero ¿no es manipular a los niños con enseñarle que Dios ríe y hay que hacerle sonreír?
- Pero… ¿cómo se imagina usted a Dios? Dios no es ese juez que usted se imagina, pues aunque usted es medio ateo… en su mente parece estar más presente que en cientos de creyentes. ¡Dios es padre! ¡Dios es amor y la primera manifestación del amor es la sonrisa!
- ¿Le puedo hacer una pregunta algo… algo íntima?
- Hágala, pero me reservo el contestarle o no.
- ¿Su Isabel sonríe mucho? ¿De verdad le hace a usted cosquillas?
- Jaja… Mi Isabel es super alegre. SU amor y su alegría han sido mis fuerzas para luchar y seguir adelante cuando todo se ponía oscuro. Su amor y su alegría son las causantes de mi equilibrio y paz externa e interna. Y para que se entere usted cuando le doy las gracias a mi Isabel y a Dios siento que Dios sonríe.
Si queremos que Dios sonría, ofrezcámosle a todos, especialmente a los que más amamos, mucho amor y mucha alegría.
Julián Escobar.
Vídeo de "Youtube"
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