Imagen extraída de "www.justart-e.com"
- ¿Cómo reaccionas cuando oyes una blasfemia?
- ¿Se te “escapan” a ti mismo?
«Señor, soy Narciso. Ya te he hablado de mi nieto Jorge. Fui a su lugar de trabajo a llevarle unos documentos y… Un compañero le dice:
- “Yo no voy a misa porque me aburre, no me dice nada”.
Y mi nieto con alegría y buen humor le suelta:
- “Te aburre porque era un ignorante litúrgico. Te sucede como a los ignorantes en pintura. Van al Museo del Prado y están deseando salir, lo que ven aunque sean obras magníficas “no les dice nada”. El cristianismo no es cuestión de emociones, sino de valores. Los valores están por encima de los emociones. Una madre prescinde de si tiene o no ganas de cuidar a su hijo, pues su hijo es para ella un valor. ¿Tú vas al dentista por necesidad o porque te gusta?”.
¡Qué nieto, qué nieto tengo!»
Julián Escobar.
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