Imagen extraída de "cuatrodeldosdeldosmildoce.files.wordpress.com"
- ¿Tienes en cuenta tus imperfecciones?
- ¿Juzgas a los demás sin tener las tuyas en cuenta?
Hoy un joven de 24 años, empezó a dirigirme su pensamiento y corazón, con gran pena y arrepentimiento. Se creía super bueno, mejor que sus amigos que van a Misa, pero… “Me eché la siesta con las ventanas cerradas para que el sol no entrara. Pero había una pequeña rendija y por ella entraba un hilo de luz. ¡Me quedé pasmado! ¡En mi habitación millones y millones de moléculas de polvo pululaban en ese angosto rayo de luz! Ya no veía la luz, sólo los millones de moléculas de polvo. He sentido vergüenza. De mis amigos sólo veo el polvo, sus imperfecciones; y de mí sólo me fijo en la luz. Te pido, Dios mío, que desde ahora en adelante, ilumines mi vida para que no olvide que sólo Tu eres Luz pura, nosotros también somos luz de tu luz, pero con miles de moléculas de polvo, de imperfecciones”. ¿Razonas tu como este joven?
Julián Escobar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario