Imagen extraída de "denazaret.files.wordpress.com"
No nos podemos acostumbrar, o caer en el camino fácil, de que todo lo que vemos existe y, aquello que se nos escapa de la vista, no.
Tenemos que tener una cosa muy clara: la Virgen creyó, esperó y confió en Dios.
Que, también nosotros, aprendamos a creer en Dios, en su Palabra, en sus promesas.
Al final de la vida ¿qué permanece y quién queda? Dios…y el cielo que nos aguarda
¿Haces lo posible por conquistar el cielo?
¿Por qué debemos controlar nuestros instintos? Porque los instintos no controlados son ciénagas que se convierten en arenas movedizas que terminan tragándonos. ¿Se está usted hundiéndose en alguna de ellas?
Julián Escobar.
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