Imagen extraída de "sp7.fotolog.com"
¿Os imagináis que, nuestras madres, ante una injusticia cometida contra nosotros guardasen silencio? ¿No es verdad?
En cambio, María, la Madre de Jesús, guardó absoluto silencio ante la incomprensión, persecución, sufrimiento, cruz y muerte del Señor.
¿Te has preguntado por qué? ¿Tal vez porque la opinión de una mujer no hubiera servido de nada? ¿Tal vez porque era cobarde o tenía temor?
No; por supuesto que no. María optó por el silencio porque sabía, a ciencia cierta, que tenía que cumplirse la voluntad de Dios. No quiso interponerse para nada.
¿Soy prudente a la hora de hacer juicios? ¿Pienso las cosas antes de hablar?
Las personas se apartan de Dios, lo rechazan o lo marginan por fugaces placeres. Encierran sus almas en búnkeres y aunque el alma sienta claustrofobia, como rechazo inocente, guarda silencio y llora su lejanía de Dios. Muchos tratan a su alma como si su fuera una hija adoptiva no deseada. ¿Cómo la trata usted?
Julián Escobar.
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