¡El amor todo lo vence! Un joven corpulento, en un auditorio de quinientas personas, una anciana de ochenta años, psicóloga, lo saca al escenario. Le dice que ponga sus manos sobre la cabeza y le dice:
- Eres buena persona. La gente te quiere, te estima y las mujeres te admiran. Ahora voy a colgarme de tus brazos obligándoles a ceder. ¡No lo consiguió!
Le pidió que continuara con los brazos sobre la cabeza y le dijo:
- Eres una mala persona, un egoísta, no vales para nada, tratas mal a los animales y eres repelente para las mujeres. Volvió la anciana a agarrarse a los brazos del joven y consiguió bajárselos con facilidad.
¡El amor fortalece, el mal, el odio, el rencor, debilita!
El amor abre puertas, el egoísmo las cierra. El amor vence siempre, el egoísmo es derrota.
Julián Escobar.
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