“¡Qué no se turbe vuestro corazón!”.
- “La ansiedad se iba apoderando de mi cuerpo y escuchaba con claridad los latidos de mi corazón. Unos segundos después la ansiedad se convirtió en miedo”.
¡Hay que controlar las emociones y las ansias de hacerlas realidad! Las emociones son buenas, una persona sin “pasión” es casi una persona muerta. Ser una “apasionada” es magnífico, ser una persona invadida por pasiones es catastrófico. Las emociones nos empujan a la acción, nos levantan de la flojera, de la pereza, de la rutina.
Jesucristo debe ser para un bautizado la mayor de las emociones y la pasión por imitarle la más fuerte.
- ¿Dominas tus emociones?
- ¿Tu principal pasión es Amar a Dios?
- ¿Eres perezoso para todo lo religioso?
- ¿Sabes distinguir entre ser “apasionado” y estar lleno de pasiones?
Julián Escobar.
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