¡Cuidado a quien escucháis!
Se suele decir que hay personas que se quedan mirando el dedo que les señala el cielo. Eso nos puede ocurrir cuando asistimos a Misa, que nos fijemos más en el que hace las lecturas que en lo que dicen las lecturas, más en el Sacerdote que en él lo que nos dice el Evangelio.
El Obispo llamó a Miguel Ángel y le reprochó por qué a veces no se arrodillaba en la elevación del Pan y Vino consagrados, según le habían contado. Miguel Ángel respondió: “A veces quedo transpuesto ante tan inmenso Misterio. Pero decirle a los que vienen con esos chismes que estén más pendientes de la Presencia de Cristo en el Pan y Vino, que en mí”.
- ¿Le gustan los chismes, los cotilleos?
- ¿Sabe a quién escuchar y a quién no?
En lo alto de la Torre Eiffel pusieron un reloj que iba anunciando los días y horas que faltaban para el comienzo del año 2000. Nos vamos acercando al final del Adviento. ¿Está preparado para vivir la Navidad cristiana o sólo pagana?
Julián Escobar.
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