Imagen extraída de "recorridoalatierraprometida.files.wordpress.com"
¡Ojos para ver!
Cuando se discute, o se está enfadado, o en actitud pesimista, o de soberbia, ocurre que no se ve con claridad. “tienen ojos y no ven, oídos y no oyen”, dijo Cristo.
En Israel hay dos lagos: mar de Galilea y mar Muerto. Los dos se alimentan del río Jordán. El de Galilea está lleno de vida, peces y plantas. El otro, mar Muerto, no tiene vida. El mar de Galilea recibe el agua del río Jordán y la deja salir. El mar Muerto recibe el agua y la retiene. ¡Todo lo que no se da, se pudre y muere!
Para tener vida hay que dar vida, hay que mirar también con los ojos de la Fe, esperar con total Esperanza y obrar con amor.
- ¿Qué clase de mar eres tú?
- ¿Eres agua dulce o salada?
- ¿Miras sólo con los ojos de la cara o también con los del corazón?
Julián Escobar.